Quienes Somos
Colegio Ana María Janer de Viña: una Escuela Católica con identidad propia
Nuestra carta de presentación
Desde el comienzo, la educación fue motivo de preocupación y seria dedicación para la Madre Ana María y las primeras hermanas. Madre Ana María Janer ponía todo su empeño en bien de la promoción cultural y espiritual de niños y jóvenes.
En el año 1924, la elaboración del “Directorio Pedagógico”, explicita una línea de educación integral, humana y cristiana. Una acción educativa que fomenta el desarrollo intelectual, promueve el descubrimiento de valores y la formación de actitudes que capacitan al alumno para la vida.
Fundación de Viña del Mar
En el año 1938 en Miraflores Alto, Viña del Mar, el misionero español Padre Bernardo Franco, religioso benedictino, inició la construcción de la Iglesia del Santo Cristo que hoy es conocida como “Iglesia de Piedra”.
- Años después el visionario sacerdote pensó hacer un colegio para los hijos de los obreros de la zona y para ello necesitaba personas que le ayudaran en esa misión tan delicada.
- Fue así que en Febrero de 1958, llegan a colaborar en su obra las Religiosas de la Sagrada Familia de Urgel.
- Así , con ilusión y esperanza el 25 de marzo de 1958 nuestro colegio inicia sus actividades.
- En el año 1968, la Escuela Técnica pasa a ser Instituto Comercial Lourdes, empezando con solo 29 alumnas.
- En el año 1972, se reconoce oficialmente la Escuela Básica con el Nº 227, quedando así conformado el Instituto Comercial y la Escuela Básica “Nuestra Señora de Lourdes”.
Rasgos de identidad
- Somos un Centro educativo cristiano, inserto en la comunidad de Miraflores Alto, que ofrece una propuesta educativa abierta a todos los que quieran compartir la visión cristiana del hombre, de la historia y del mundo que sin ambigüedades apostamos a hacer frente a la cultura del relativismo imperante.
- Desde nuestra identidad janeriana, ofrecemos respuesta a las necesidades de educación y promoción integral de los niños en las etapas claves de su desarrollo, que abarcan el nivel pre básico, básico y enseñanza media teniendo en cuenta las etapas del desarrollo humano y cristiano. Para ello personalizamos las relaciones educativas, tanto con los alumnos como con los educadores y las familias, creando el ambiente que nos inculcó nuestra Madre Fundadora, que tiene como modelo a la Sagrada Familia, “primer centro educativo cristiano” y promovemos la responsabilidad personal, el respeto y la caridad cristiana como base del hombre nuevo que se inserta en la sociedad.